Sacude el mal humor

Pendientes en casa, café derramado, tráfico en exceso, llegada tarde, son situaciones que enfrentamos a diario y provocan que comencemos mal el díal.

Y si tú o alguien de tu equipo inicia el día de malas, es probable que su jornada continúe así e irremediablemente afecte su rendimiento y motivación.

Los líderes son sensibles a esto y pueden ayudar a romper el mal humor, usando botones de emergencia para «resetear» el ánimo y reenfocar la energía positivamente. He aquí algunas ideas …

• Ronda matinal. Dar una vuelta al piso o por los lugares de trabajo de la gente, usando la fórmula mágica: llamerles por su nombre, mirarles a los ojos, preguntarles ¿cómo están? en forma personal.

• Un booster. Envía periódicamente un mensaje positivo por whatsapp o email, con alguna idea sugerente, un reconocimiento, una frase célebre o una propia.

• Pan y sal. Lleva algún bocadito para compartir. Ayuda a crear vínculos y espacios de diálogo. Procúralo siempre que haya algún acontecimiento a celebrar, como una meta cumplida, un hecho significativo de un proyecto o un aniversario.

• Mindfulness. Promueve con el equipo conversaciones explícitas acerca de cómo el mal humor ha repercutido en el desempeño y en la interacción con otros.

• Buenas prácticas. Compartir con el primer equipo las buenas prácticas y experiencias vividas como resultado de aplicar los dos puntos anteriores, para que ellos las repliquen hacia sus equipos.

Por cierto, evita enviar aluviones de correos por la noche que pueden tratarse después y que solo impiden el descanso, saturan y bloquean el entusiasmo.

Las mejores prácticas serán comentadas y replicadas, hasta que se conviertan en un «must» como forma de trabajo habiltual y sello de un liderazgo positivo.

Ángel Rivero