¿Qué hacer ante un comentario inapropiado?

Todos hemos vivido la experiencia de recibir un comentario inapropiado o inclusive ofensivo. Responder puede ser riesgoso, al igual que no hacerlo. Si respondemos en cualquier forma solo hace más grande el problema, pero si no lo enfrentamos damos permiso al otro para hacerlo de nuevo. Para elegir qué hacer necesitamos considerar algunas cosas:

Distingue la intencionalidad. El comentario ¿tiene la intención de ofender o fue solo una ligereza imprudente? Cuida no reaccionar bajo supuestos o interpretaciones subjetivas. Identificar la intención te dará la pauta de qué hacer. Si solo fue una ligereza, la otra persona no tendrá una carga emocional negativa y bastará que le hagas notar lo que su comentario provocó. Pero si, en cambio, hubo intención de lastimar, la situación requiere un tratamiento más delicado, para ir a la causa -la mayoría de veces oculta- que está produciéndola.

¿Qué no conviene hacer? Evita emparejar el marcador y devolvérsela. No te dejes ir por las voces internas que te dicen: «no me debo dejar», «ella empezó, así que». Tampoco sirve responder poniendo adjetivos a la conducta del otro, como «eres grosero» o «eso solo muestra tu ignorancia» o, peor aún, hacer declaraciones tipo «eso es racismo» o «eres sexista». Toda calificacion lleva un jucio de valor implícito que puede ser incompleto y provocar que el otro se cierre o reaccione peor y no cambie su comportamiento. 

¿Qué puedes hacer? Podrías decir: «estoy confundido por lo que comentaste» o «eso que dijiste me hizo sentir incómodo». Esto no significa eludir el asunto; en realidad es un enfoque más eficaz que te permite ir al fondo. También puedes hacer preguntas como «¿qué querías decir con ese comentario?» o «¿en qué información te estás basando?». También puedes solicitarle que repita el comentario. Esto le llevará a pensar en el trasfondo o en el efecto que hace sobre los demás, y le dará la oportunidad de modificar.

Ángel Rivero